Silvia Solans
Docencia
CANTO MODERNO
¡Hola!
Soy Silvia Solans, cantante y profesora de canto.
Mi formación pasa por llevar dos décadas sin parar de cantar – casi por completo de forma profesional - , siete años metida en las aulas como docente, la carrera de Arte Dramático según la EMTZ de Zaragoza, varios cursos de Estill Voice Training, Técnica Alexander, y experiencia en todo tipo de hechos escénicos y musicales: como presentadora de galas y eventos, como locutora de radio con mi propia sección de música durante cuatro años en Aragón Radio, como voz de vídeos corporativos y spots o como conferenciante hablando de música moderna.
Ahora mismo tengo en activo varias formaciones musicales (a dúo/a trío/con banda, con una amplia variedad de estilos) y trabajo también como cantante por encargo para estudios de grabación o directos. Como docente creé hace unos años el curso ‘Cómete el Escenario’ con herramientas escénicas para cantantes, hago clases particulares en las que me vuelco en el alumno y hago talleres vocales de temáticas concretas incluyendo retiros vocales.
En realidad el hecho de llevar veintiún años subida a escenarios con pasión absoluta por la música dan para mucho, pero sobretodo para hallar ciertas certezas: que lo más importante del hecho musical va de la mano con el hecho humano. Es decir, que concibo la música como disfrute, como autoconocimiento, como parte de nuestro desarrollo como seres humanos. Concibo ser cantante como un oficio, como una artesanía que se va perfeccionando con los años y la experiencia. No lo concibo como un hecho exhibicionista, casi ni como un negocio. Cantar es una de las experiencias más preciosas y catárticas que hay, y no pasa un solo día en que no agradezca dedicarme a lo que me dedico: creo fervientemente que la voz es un vehículo de conexión, de compartir, de entendernos mejor, de hallar un abrazo y una sinceridad extraordinarios que no nos podemos perder. Es un acto íntimo compartido: hallamos nuestra humanidad en nuestra voz, y así lo compartimos.
Creo en acompañar a mis alumnos como seres humanos con sus días buenos y sus días malos, creo en estar cerca de su proceso compartiendo lo que sé para que sean libres y felices cantando, creo en respetar su ritmo, en que sus voces sean suyas y de nadie más.
Pero sobretodo creo en el camino, con sus rosas silvestres y sus fangos, porque eso es lo real.
Gracias por haber llegado hasta aquí.
Nos vemos pronto :)